jueves, 5 de enero de 2012

Abominación: la muerte más digna

Rosario. Fecha del evento: sábado 27 de agosto de 2011. Tres propuestas diferentes de black metal encabezaron esta jornada denominada “Oscuro Ritual”, cuya grilla comprendía cinco bandas. Este concierto se llevó a cabo con el objetivo de ponerle fin a la breve pero intensa carrera de Abominación, y además sirvió para que Espiritismo aceche por primera vez nuestra ciudad y para que Infernus reafirme su poderío en vivo. Un ritual oscuro y macabro. Una página escrita con sangre. Seres blasfemos y herejes, hordas anticristianas, los invito a leerla.


Crisis

Ingresé a El Sótano cuando Crisis estaba finalizando su set. Los jóvenes thrashers galvenses siguen dando que hablar en nuestro underground, a fuerza de energía, talento, soltura y muchas ganas derrochadas sobre el escenario.




Canciones como “Monstruo de la Montaña” dan crédito a estas palabras: puro thrash metal de raíz ochentera, que si bien parte de una fuerte influencia de bandas de la Bay Area, como Exodus y Metallica, a la misma le adicionan elementos presentes en bandas nacionales, en grupos como V8, Militia e incluso los contemporáneos Tungsteno. En definitiva, siempre entusiasma ver tocar a bandas como Crisis, un muy buen inicio para cualquier festival metálico que se precie de tal.


Oppression Silent

En segundo lugar, la otra banda invitada también llegaba desde Villa Gobernador Gálvez: Oppression Silent. Piezas cargadas de melancolía e inspiración invernal, en plan melodic doom/gothic combinado con melodic death metal, dieron marco a un show disfrutable, integrado por composiciones propias, como “Grimorium”, que nos recuerda el origen de la banda, cuando tocaban bajo este nombre.


Abominación

Era la tercera presentación en directo de Abominación, la cual fue anunciada como su “muerte en vivo”. A veces un destello brilla más intensamente que mil soles. Abominación fue una llamarada humeante de odio surgida desde la oscuridad. Y ante su inminente deceso, no titubeó, sino que se elevó aún más desde las profundidades, como bestia maligna impiadosa, avasallante en su voluntad de poder.
Abominación pisó un escenario decorado con falsas cabezas de cerdo sujetadas por alambres de púa, colocadas sobre enormes cruces invertidas. Mientras sonaba la marcha fúnebre, el frontman Saidak se dispuso a pronunciar una invocación, generando el ambiente ideal para la tormenta sonora que se avecinaba. Durante 20 minutos, Abominación brindó su repertorio, conformado por piezas que desbordaban de ferocidad, crudeza y odio.




No es necesario ahondar en aspectos musicales ni en influencias perceptibles para hablar de Abominación, simplemente cabe aclarar que esta banda poseía la esencia del verdadero sonido del black metal: el del fuego ardiendo en las iglesias.
En el tema final, “La Razón de un Ser Maldito”, solamente quedaron sobre el escenario el guitarrista, quien se hizo cargo de la voz, mientras que Saidak tomo posesión de la batería. Tras esta culminante ráfaga de oscuridad, Abominación pondría punto final a sus acciones. El vocalista Saidak volvió a tomar el micrófono, exclamó una nueva invocación y elevó su puño: todo un signo de poder, firmeza y dignidad ante la muerte.



Desde la ciudad de San Miguel, provincia de Buenos Aires, llegaba Espiritismo, quienes se presentaban por primera vez en Rosario. Lo suyo es un black metal intenso, profundo, atmosférico y denso, difícil de asimilar incluso para algunos que ya están iniciados en el estilo. De alto vuelo artístico y muy enfermo.
En cuanto a la puesta en escena, cabe mencionar que los músicos de Espiritismo tocaron en penumbras y rotaron en la ejecución de los instrumentos, dándole más personalidad y originalidad a la propuesta de la banda en vivo.
Espiritismo es una banda de esas que merece ser escuchada y apreciada detenidamente, dejando que su música fluya y penetre en nuestro oscuro interior.


Infernus

Por último, Infernus se encargó de clausurar el festival de la mejor manera.
Infernus es, junto a Culto Macabro, una de las agrupaciones rosarinas de black metal más antiguas de las que están en actividad (se formaron en 2004); en esta oportunidad presentaron una formación renovada, con la novedad de que ya no cuentan con un tecladista para sus shows en vivo. Este último factor resultó ser crucial para su performance esa noche: pudimos apreciar la versión más cruda de Infernus, directa y maldita. Nada atenuaba la masacre infernal que atacaba a nuestros oídos, sin duda más que una pérdida o una limitación, esta modificación fue capitalizada por la banda como un paso más en su evolución.
Un detalle curioso: el bajista de Infernus en este recital fue Dreignor, quien toca ese instrumento de manera estable en Espiritismo (alternando con la guitarra y la batería) y esa noche además se encargó de tocar la batería en buena parte del set de Abominación; en definitiva, una muestra de lo que es la pasión por tocar música en el underground.
Además de tocar canciones que hace tiempo integran su repertorio, como “Satánico Holocausto”, Infernus presentó su nuevo EP promocional, el cual fue editado con posterioridad a esta fecha.


Este primer “Oscuro Ritual” representó un aporte enriquecedor a nuestra escena, gracias a la muy buena organización, que corrió por cuenta de Saidak, al frente de Warui Discos. Ojalá sea el comienzo de algo perdurable y maldito, que podamos disfrutar al menos una vez por año.


*Todas las imágenes que ilustran esta crónica fueron tomadas de sitios oficiales de las bandas y de los músicos.

1 comentario:

  1. En nombre de Warui Discos, yo Saidak agradezco esta crítica y apoyo a este evento ocurrido hace ya poco mas de un año.
    Espero poder contar con todos uds la proxima vez.
    Saludos a todos.

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