A las 23:25, cuando la gente comenzaba a ingresar al recinto, Dislexya se despachó con un set demoledor. Ya había tenido la oportunidad de verlos el domingo anterior en un concierto a beneficio organizado por la gente del programa radial Almas de Negro, en el cual compartieron escenario con Distopía, Infernus y Synthetic Soul de Paraná, sorprendiendo a más de uno por la calidad y agresividad de su sonido, así como por su actitud en escena. Exactamente lo mismo sucedió en esta ocasión, pero en el marco de una fecha de mayor envergadura.
Dislexya es la agrupación más joven del metal rosarino, ya que ninguno de sus integrantes supera los 16 años de edad, y también es, hoy por hoy, la promesa más sólida de una nueva camada de bandas rosarinas que está empezando a asomar. La música que practican es un thrash/death metal heredero de la vieja escuela, con marcada predisposición al death, en la vena de leyendas como Death, Sepultura, Slayer, Morbid Angel, Possessed, por citar algunas que vinieron a mi mente mientras los escuchaba. Entre los temas que tocaron pueden destacarse algunos propios como “Tutankamón”, “Necrofilia” y “Crucifixión”, además de interpretar un cover de Death, “Master of Puppets” de Metallica y “Raining Blood” de Slayer, nada más y nada menos, contagiando a los presentes a sumarse al pogo y a sacudir sus cabezas como maníacos a puro headbanging.
La presencia escénica de Dislexya resulta fuerte y poderosa, sobre todo por la firme actitud del vocalista/guitarrista Nicolás Yanco y la movilidad del hábil bajista Pablo Ruiz.
Son músicos muy jóvenes y todavía tienen cosas que corregir y mucho camino por recorrer. Si no desvían su rumbo y siguen por la senda que están transitando en este auspicioso comienzo de su carrera, Dislexya puede aportarle mucho al metal rosarino. Que así sea!
Ya pasada la medianoche, Saque hizo su presentación. Con la misma energía a la que nos tienen acostumbrados, los músicos encabezados por el talentoso vocalista Pablo Puntarello ofrecieron un puñado de temas propios como “Suburbios”. “Oportunidad”, “Todo es vanidad”, “Súplica”, “Enseñanzas”, etc. Lamentablemente tuvieron algunos inconvenientes sonoros, ya que no podían distinguirse con nitidez las guitarras, tornándose “sucio” el audio.
De todas maneras, la gente respondió con aplausos y se fue contagiando a medida que pasaban las canciones, elevando sus puños cuando hicieron el cover de Manowar “Hail and Kill”, mientras el local se llenaba de humo generándose una atmósfera muy ochentera.
Cerraron su actuación invitando a cantar con ellos a Pelón, vocalista de Cruzada, quien desarrolló un interesante dueto junto a Puntarello.
Ocupando el tercer lugar de la grilla, Sin Piedad ofreció un show devastador. Tras un inicio con algunas complicaciones mientras abrían con “Agonizas”, las dificultades sonoras fueron solucionadas y así pudimos apreciar todo el poderío y la potencia actual de Sin Piedad, en composiciones propias como “Destierro”, “No más vida”, “Falsa Religión”, etc., sobresaliendo las ajustadas bases y la riqueza que el componente death le aporta a su sonido thrasher original, ya sea en la afinación y en la estructura de los riffs como en la agresiva voz de Adrián Llano. Otro detalle importante: Adriana Heredia ha comenzado a implementar un trigger en su batería, aportándole contundencia extra en cada golpe, con exitosos resultados.
Sin Piedad aprovechó esta oportunidad para presentar un par de temas nuevos: “Rencor Marginal” y “Blanca Esclavitud”. Entre aplausos y gestos de aprobación, se despidieron con un cover dedicado especialmente al organizador Ariel Vera: nada más y nada menos que “Tormentor” de Kreator, vieja joya incluida en el fundamental “Endless Pain” de 1985. Pogo y cráneos masacrados.
SETLIST SIN PIEDAD
1. AGONIZAS
2. DESTIERRO
3. NO MÁS VIDA
4. VOCES
5. RENCOR MARGINAL
6. TRAFICANTES DE DOLOR
7. BLANCA ESCLAVITUD
8. FALSA RELIGIÓN
9. TORMENTOR (Kreator cover)
Necratal, provenientes de General Pacheco, llegaba como la banda que acompañaba a Serpentor en la gira. Descargaron su furioso thrash metal con matices groove, que acusa influencias de Slayer, Lamb of God, Pantera, Sepultura y The Haunted. Con el frontman Enzo López moviéndose por todo el escenario y los músicos sonando muy ajustados, Necratal se mostró firme apoyado en piezas musicales propias como “Cacería”, “Insano”, “Poseído”, “Cadenas”, “Siempre”, “Marcado en la Piel”, etc., que pasarán a integrar su disco debut. La gente respondió con aplausos, puños en alto y sumándose al pogo, el cual se potenció cuando hicieron un cover de Sepultura y “Walk” de Pantera. Muy buena performance de Necratal, un quinteto a tener en cuenta dentro de la nutrida escena under del Gran Buenos Aires.
Finalmente, al las 3:45, Serpentor pisó las tablas y desató una furiosa descarga de puro thrash metal. Esta es la primera vez que se presentaban en Rosario con Guillermo “Temo” Romero como cantante, quien regresó a la banda el año pasado y le puso voz al nuevo disco. Los thrashers recibieron muy bien a Serpentor, quienes cumplieron brindando un concierto arrasador, a la altura del buen nombre que han sabido ganarse en la escena nacional. Durante una hora hicieron un repaso de su discografía, incluyendo material de “Privación Ilegítima de la Libertad”. Así fue que sonaron “Controlando la Nación”, “Asesinos”, “Militares Criminales” y “Mirar sin ver”, entre otras, canciones netamente thrash en el estilo de Testament, con letras de contenido social, que reflejan problemáticas cotidianas que se viven en nuestro país y en el mundo.
En cuanto a lo instrumental, Serpentor es una “aplanadora”: suenan sólidos y compactos, a puro machaque apoyados en una contundente base rítmica, con 2 guitarristas que cumplen muy bien la función de disparar riffs y ejecutar los solos, algunos de ellos con muy logradas melodías más cercanas al heavy metal tradicional. Un muchacho de nombre Cristian fue el otro violero que acompañó a Jorge Moreno en esta fecha, en reemplazo de Jorge Alcaraz que no pudo viajar por cuestiones laborales. Por su parte Romero se desenvuelve con soltura frente al micrófono, interactuando con la audiencia y arengando.
El tramo final de la actuación de Serpentor estuvo conformado por temas como “Corrupción S.A.”, “Enfermo Poder”, “Privación Ilegítima de la Libertad”, “Vomitando Odio” y un par de covers que desataron instantáneamente la euforia: en primer lugar se dieron el gusto de interpretar “Cautivos de un Sistema”, clásico de V8 recibido con total algarabía tanto por los metaleros más jóvenes como por los veteranos; y como cierre definitivo de esta memorable jornada thrasher tocaron “Lloviendo Sangre”, versión en castellano de “Raining Blood” incluida en el segundo disco de Serpentor, desembocando en un frenético pogo y headbanging compulsivo.
No hay mucho más para agregar. Thrash o muerte.
*Todas las fotografías fueron tomadas de sitios oficiales de las bandas y de los músicos.
